The insulators, in their daily operation, are subject to the action of the environment and their own exploitation, being understood between the latter the tensions at the frequency of the system and the surges that originate from different causes. In the case of the environment are two fundamental factors that cause the insulator to lose its insulating characteristics: the accumulation of polluting particles on the surface of the same that when it is wetted by light rain or fog becomes conductive, to such an extent that an arc of current, or discharge, is established between the structure that supports the insulators and the conductors, damaging the whole assembly and causing cuts or interruptions in the transmission or distribution of energy, causing reliability problems of the service, on the other hand, The metal parts of the insulators are affected by corrosion problems affecting their mechanical characteristics. Industrial users demand high reliability services, which not only comply with certain voltage and frequency ranges but also offer continuity in service; Among the processes that are most affected by the cuts in the service are those of automatic industrialization, because they are increasingly sensitive and can alter a process with a minimum interruption in service and causing millions in losses. Determine when to take corrective actions to anticipate transient or permanent failures in high voltage insulators has been a problem for companies in the electricity sector for many years; In the case of pollution, the solution has been towards the replacement of the insulation or the execution of periodic washings of the same, sometimes without any technical criteria, which demands a considerable workforce. In the case of corrosion or the partial or total destruction of insulation by surges, companies have no choice but to replace the insulation when the failure occurs, in general, or what is known as the application of corrective maintenance. In recent years, this problem has become more important as a result of the free competition of companies in the electricity sector, since it requires an optimization of them and therefore a reduction in maintenance and labor costs. The present work tries to expose the close relationship that exists between isolation and reliability from the new paradigms that appear in the maintenance activity, which offer some interesting changes in the environment until now seen in this direction.
Los aisladores, en su operación diaria, están sometidos a la acción del medio ambiente y de su propia explotación, entendiéndose entre estas últimas las tensiones a la frecuencia del sistema y las sobretensiones que se originan por diferent es causas. En el caso del medio ambiente son dos factores fundamentales los que provocan que el aislador vaya perdiendo sus características aislantes: la acumulación de partículas contaminantes sobre la superficie de los mismos que cuando es humedecida por lluvias ligeras o niebla llega a ser conductora, a tal grado que se establece un arco de corriente, o descarga, entre la estructura que soporta los aisladores y los conductores, dañando a todo el conjunto y ocasionando cortes o interrupciones de la transmisión o distribución de energía ocasionando problemas de confiabilidad del servicio , por otro lado, las partes metálicas de los aisladores son afectadas por problemas de corrosión afectando sus características mecánicas. Los usuarios industriales demandan servicios de alta confiabilidad, que no sólo cumplan con ciertos rangos de tensión y frecuencia sino que también ofrezcan una continuidad en el servicio; entre los procesos que más son afectados por los cortes en el servicio están los de industrialización automática, debido a que son cada día más sensibles pudiendo alterar un proceso con una mínima interrupción en el servicio y ocasionando pérdidas millonarias. Determinar cuando tomar acciones correctivas para prever los fallos transitorios o permanentes en los aisladores de alta tensión ha sido un problema de las empresas del sector eléctrico por muchos años; en el caso de la contaminación, la solución ha estado hacia la sustitución del aislamiento o la ejecución de lavados periódicos del mismo, a veces sin ningún criterio técnico, lo que demanda una mano de obra considerable. Para el caso de la corrosión o de la destrucción parcial o total del aislamiento por las sobretensiones, las empresas no tienen más remedio que la sustitución del aislamiento cuando ocurre la falla, de manera general, o lo que se conoce como aplicación del mantenimiento correctivo. En los últimos años este problema ha tomado más importancia como consecuencia de la libre competencia de las empresas del sector eléctrico, ya que se necesita una optimización de las mismas y por ende una reducción de los costos de mantenimiento y mano de obra. El presente trabajo trata de exponer la relación estrecha que existe entre aislamiento y confiabilidad a partir de los nuevos paradigmas que se presentan en la actividad de mantenimiento, los cuales ofrecen algunos cambios interesantes en el entorno hasta ahora visto en esta dirección.